Los dedos de los pies dormidos son una sensación desagradable que se siente cuando hay una disminución o pérdida temporal de la sensibilidad de los dedos de los pies. Esta sensación se conoce comúnmente como entumecimiento, hormigueo o adormecimiento. Estas sensaciones pueden ser intermitentes o persistentes, leves o intensas. Generalmente, se asocia con el uso prolongado de la misma posición, como estar sentado en la misma posición durante largos periodos de tiempo, o de presión, como el uso de zapatos ajustados. A veces, los dedos de los pies dormidos también se pueden sentir si hay una lesión en la espalda baja o la columna vertebral.

Los dedos de los pies dormidos pueden ser una señal de que hay una afección médica subyacente. Estas afecciones pueden incluir trastornos musculares, como la fibromialgia, enfermedades del sistema nervioso, como la neuropatía diabética, o enfermedades del corazón. También puede ser un síntoma de una lesión o una enfermedad autoinmune, como la esclerosis múltiple.

La mayoría de los casos de dedos de los pies dormidos son temporales y se pueden tratar con cambios en la postura y el uso de ropa y calzado adecuado. Si los síntomas persisten y se agravan, se recomienda consultar a un doctor para descartar una condición médica subyacente. Si se detecta una enfermedad, el tratamiento puede incluir medicamentos, fisioterapia, terapia de masajes, acupuntura y terapias de relajación.