Subiendo al Tourmalet: ¿Cuántos Kilómetros?”
Subir al Tourmalet es un gran reto para cualquier ciclista profesional o aficionado. Situado en los Pirineos franceses, este puerto de montaña es icónico en la historia del ciclismo, habiéndose disputado multitud de etapas del Tour de Francia en este lugar. Pero, ¿cuántos kilómetros tiene?
En concreto, el puerto de Tourmalet tiene una longitud de 19 kilómetros y una altura máxima de 2.115 metros sobre el nivel del mar. Aunque esta distancia puede parecer asequible para muchos ciclistas, la verdad es que la inclinación de las rampas, especialmente en la parte final, hace que subir el Tourmalet sea todo un desafío.
Además, el puerto de Tourmalet forma parte de un recorrido más amplio, la ruta desde Sainte-Marie de Campan hasta La Mongie, que tiene una longitud total de 27 kilómetros. Este tramo, que incluye también la subida al Col du Télégraphe, es uno de los más duros del Tour de Francia y exige una gran resistencia física y mental por parte de los ciclistas.
En resumen, subir el Tourmalet es una hazaña que todo buen ciclista debería intentar al menos una vez en su vida, aunque la longitud de los kilómetros no sea excesivamente larga, la dureza del puerto y la belleza del paisaje hacen de este desafío algo especial.
¿Qué ascensión del Tourmalet es la más dura?
El Tourmalet es un puerto de montaña de los Pirineos franceses que se ha convertido en uno de los lugares más emblemáticos del ciclismo mundial. Cada año, miles de ciclistas de todo el mundo desafían sus 19 kilómetros de ascenso y sus rampas que llegan al 10% de pendiente media.
Existen varias rutas para ascender el Tourmalet, pero ¿cuál es la más dura? La respuesta puede variar en función de diferentes factores, como la distancia, la pendiente o las condiciones meteorológicas.
Una de las ascensiones más duras del Tourmalet es la que parte desde La Mongie. Esta ruta cuenta con una longitud de 17,1 kilómetros y una pendiente media del 7,4%, aunque en algunos tramos llega al 10%. Además, los últimos 3 kilómetros son especialmente duros, con fuertes pendientes y una altitud que supera los 2.000 metros sobre el nivel del mar.Otra de las rutas más exigentes es la que comienza en Luz-Saint-Sauveur.
Este ascenso es considerado como el más difícil del Tourmalet, debido a su pendiente y a su longitud. Los ciclistas tendrán que recorrer 19 kilómetros con una pendiente media del 8,5%, y llegando al 10% en algunas secciones. Además, los últimos kilómetros son especialmente exigentes, con pendientes que rozan el 12%.Por último, otra de las opciones más duras es la que parte desde Sainte-Marie-de-Campan.
Esta ruta cuenta con una longitud similar a la de Luz-Saint-Sauveur, pero su pendiente media es ligeramente menor, del 7,4%. Sin embargo, se trata de una ascensión muy exigente debido a su dureza constante y a la falta de zonas de descanso. Además, los últimos kilómetros son bastante duros, con fuertes rampas que superan el 10% en algunos tramos.En definitiva, la dureza de cada ascenso dependerá de varios factores, pero podemos concluir que la ruta que parte desde Luz-Saint-Sauveur es considerada como la más dura del Tourmalet, seguida de cerca por la que comienza en La Mongie.
¿Dónde empieza la subida al Tourmalet?
Si estás planeando subir el famoso puerto de montaña francés del Tourmalet, es esencial que sepas dónde comienza la subida. La subida al Tourmalet empieza en la villa de Sainte-Marie-de-Campan, ubicada en el departamento de Alto Pirineo. Esta pequeña villa es el punto de partida para muchos ciclistas y aficionados del ciclismo que desean conquistar este desafío.
Desde Sainte-Marie-de-Campan, los ciclistas encontrarán un camino bien señalizado que va directamente hacia la cima del Tourmalet. A medida que se alejan del pueblo, la carretera se vuelve más pronunciada y empiezan a aparecer los primeros paisajes de montaña. La subida al Tourmalet tiene un recorrido total de 19 km, con un desnivel de más de 1400 metros.
Una de los puntos atractivos de la subida al Tourmalet es la belleza natural que rodea la carretera. Los ciclistas pasarán a través de cárcavas y cañones, contemplando vistas impresionantes del Valle de Campan y la cima del Tourmalet. Además, en el camino hay varias estaciones de esquí y refugios que ofrecen la oportunidad de descansar y recargar energías para continuar.
En resumen, la subida al Tourmalet es un desafío emocionante y épico que empieza en el pueblo de Sainte-Marie-de-Campan, en el Alto Pirineo francés. El camino hacia la cima es duro y exigente, con hermosos paisajes y una belleza natural impresionante. Es un reto que todos los ciclistas apasionados deberían tomar al menos una vez en la vida.
¿Cuánto desnivel tiene el Tourmalet?
El Tourmalet es una famosa cima que se encuentra en los Pirineos franceses y que es muy visitada por los ciclistas. El desnivel que tiene la cima es impresionante, ya que se trata de una de las subidas más duras y exigentes de todo el mundo.
En concreto, el Tourmalet cuenta con una altitud de 2,115 metros sobre el nivel del mar. Desde su base, la carretera que lleva a la cima asciende durante 19 kilómetros. Durante este recorrido, los ciclistas tendrán que superar un desnivel de nada menos que 1,267 metros.
Esto significa que el porcentaje de pendiente que los ciclistas tendrán que afrontar es muy elevado, especialmente en algunos tramos que superan el 10% de inclinación. Además, el clima en la zona puede ser muy cambiante, lo que añade otro factor de dificultad a la ascensión.
En definitiva, el Tourmalet es un reto excepcional para cualquier ciclista que quiera poner a prueba su resistencia y su fuerza. Con su elevado desnivel y su impresionante altitud, esta cima es una de las más exigentes y famosas del mundo para los amantes del ciclismo.
¿Qué quiere decir Tourmalet?
El nombre "Tourmalet" hace referencia a un paso de montaña en los Pirineos, famoso por ser uno de los más exigentes de Europa en el ciclismo de carretera.
La palabra "Tourmalet" procede de la lengua local de la región, más concretamente del occitano. En este idioma, "turm" significa "colina", mientras que "alet" se traduce como "pequeño". Por lo tanto, "Tourmalet" sería algo así como "pequeña colina".
Sin embargo, esta traducción es algo engañosa, ya que el coloso pirenaico en realidad no es ni pequeño ni sencillo de subir. Con una elevación de 2.115 metros, representa todo un desafío tanto para los ciclistas profesionales como para los aficionados.
Desde la inclusión del Tour de Francia en 1910, el Tourmalet ha sido el escenario de numerosas batallas épicas dentro de esta prestigiosa competición. Ciclistas legendarios como Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Miguel Indurain o Lance Armstrong han dejado su huella en la historia de este puerto de montaña, convirtiéndolo en un auténtico icono del ciclismo internacional.
Por todo ello, el Tourmalet es sinónimo de esfuerzo, superación y pasión por el deporte. Un nombre que simboliza la grandeza de una de las cadenas montañosas más impresionantes del mundo y de todo lo que representa el ciclismo como disciplina deportiva.